"Con 14 años salía del colegio e iba a comprar droga para mi madre". Con una sinceridad nacida de su espíritu de superación, Isabel Sartorius desgrana pasajes desconocidos de su vida, vivencias oscuras y hasta ahora mantenidas en la sombra, en Por ti lo haría mil veces (Martínez Roca), un libro que sale hoy a la venta.
Su relación de codependencia con su madre, Isabel Zorraquín, ya fallecida, que se casó en segundas nupcias con Manuel Ulloa Elías, es el eje principal del libro. "Estábamos tan unidas, la quería y me preocupaba tanto que me até a ella. [...] Esa unión tan intensa nos enredó y dejó en mí la semilla de un trastorno que marcaría mi futuro". Sartorius cuenta incluso que a los 14 años salía del colegio e iba a comprar cocaína a su madre.
Como no podía ser menos, Sartorius dedica un capítulo entero a su noviazgo juvenil con el príncipe Felipe. Asegura que lo suyo fue un auténtico flechazo. Se conocieron en una cena a la que no le apetecía ir, y le tocó a su lado en la mesa. "Esa misma noche empecé a quererlo", revela. "Mi relación con don Felipe fue algo muy profundo, muy espiritual. A su lado, con él, tuve una sensación de hogar, como si todo el dolor que había sufrido hasta entonces hubiese tenido un significado. En todo este lío de desestructuración y mi madre enferma apareció un príncipe azul que era un príncipe de verdad. Podía no haberlo sido. Quiero decir, podía haber sido un buen chico. [...] Era el príncipe de la película, el que llega a tiempo para el rescate".
Isabel también hace un ejercicio de autoanálisis sobre impacto que tuvieron en ella la fama y el juicio constante sobre si podía o no ser reina. "'No soy digna', me repetía a mí misma. [...] Sentía como si me estuviese asfixiando y no me creía a la altura. Cuando llevas tanto tiempo viviendo en un ambiente de mentiras, de drogas, de estrés, hay una parte de ti que se siente sucia". Sobre su ruptura, aclara que nunca hubo presión por parte de la familia real, como se llegó a decir, y que ella nunca lo vivió así. "Me sentí en un hogar, fueron adorables".
Isabel salió con el príncipe Felipe desde los 24 hasta los 27 años. Después se mudó a Londres y estudió Arte en Sotheby's. Más tarde comenzó una relación con Javier Soto, padre de su hija Mencía, pero ella lo dejó antes de la boda. El día que se anunció el compromiso con Letizia, Isabel recibió un mensaje del príncipe en el que le comentaba que se iba a producir ese comunicado. Letizia y ella son buenas amigas. De hecho, Isabel consultó con ambos antes de publicar el libro.
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